Lo escuché años atrás en una de mis películas favoritas: “Son tiempos difíciles para los soñadores”.
Los sueños buscan barcos donde flotar,
pero las olas los encuentran primero.
Parece que los sueños saben nadar,
pero no les lanzamos anzuelo.
Hace tiempo que los sueños no han salido a danzar,
no se ven a los ojos, ni sienten sus pies.
Antes, los invitábamos a improvisar,
pero los románticos ya no sabemos qué es.
Los trabajos consumen, las obligaciones contienen,
las deudas brotan y la vida pasa.
Ahora más que nunca
los sueños buscan alas, quieren voz.
Se refugian en el miocardio
para no ser arrancados del corazón.
Son tiempos difíciles para los soñadores.
Pero siempre será mejor saltar al vacío
que no haber usado el impulso.
Siempre será mejor intentar hacer fuego
que congelar la voluntad del alma.
Arriésgate, y si es necesario, piérdete, date en la madre.
Es en los tiempos difíciles, donde los sueños pueden gritar.
Respira, resiste, restart.
Alejandra Cárcamo @ale_clz
Imagen: Pinterest